Presentación de «Querida, el musical» en el Teatro Lux de Guatemala

La obra Querida, el musical fue el segundo de este tipo que vi en mi vida. El primero de ellos fue La mujer que nunca soñé, justamente en el mismo escenario, el del Teatro Lux, en la Sexta Avenida, de la Ciudad de Guatemala.

Con Nidia asistimos con una gran expectativa. Al entrar a la sala del teatro vimos el escenario con sus mesas dispuestas de tal manera que parecía ser una especie de restaurante o cabaret y en la parte de atrás el espacio con los instrumentos que utilizaría la agrupación de orquesta para acompañar las canciones.

No se diga la parte superior del escenario que ya se veía el rótulo neón con la palabra «Querida».

Argumento de la obra de teatro «Querida, el musical»

Es la historia que reúne las simpáticas personalidades entorno a Querida, un centro de entretenimiento que cuenta con trayectoria en el medio, que de hecho está por celebrar a lo grande su aniversario.

El hijo de la dueña del lugar está enamorado de una empleada: para él es algo que supone una distracción para administrar el negocio y convertirse en la estrella musical. Mientras tanto, hay un cliente misterioso que siempre llega a consumir lo mismo, acompañado de una bella mujer.

Las dificultades para concretar amores y para que se destruyan otros, así como el surgimiento de sorpresas también tienen lugar en este musical. Los celos, infidelidades amores, amistad, alegría son parte de la vida cotidiana y aquí se muestran en las interacciones de los personajes.

Mi comentario para «Querida, el musical»

Aquí no hay enredos, las pequeñas historias se entrelazan porque en ese ambiente es donde el amor nace, con ciertas dificultades crece y logra florecer. Conforme van ocurriendo los hechos, las intervenciones de los actores interpretando las canciones le brindan dinamismo a la obra.

Las intervenciones de los artistas para interpretar esas canciones especialmente pensadas para la obra, son sin duda espectaculares. Claro, sin mencionar la interacción del elenco y el público asistente, sino el rompimiento de la cuarta pared que hay cuando los bailarines, así como al inicio de la obra, llegan a compartir con el público, eso sí, con una gran diferencia.

¿Y cuál es esa diferencia? Que bajan al área de las butacas para servir shots de tequila y a bailar al ritmo de la canción que interpreta el personaje que se convierte en la estrella de la noche.

El resultado: una alegre combinación baile, espectáculo y diversión.

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s